¿Cómo te sentirías sin agua, sin techo, sin comida?
Vivimos en un mundo donde el respeto hacia la naturaleza nos ha abandonado. Muchas personas se quejan sobre los cambios que sufre el medio ambiente pero yo no veo de qué sirve estar echado en un sillón quejándose si al final no se va a resolver nada. Otras personas ayudan al medio ambiente talando arboles y plantando otros para volverlos a talar, a fin de cuentas lo que en realidad les interesa es el dinero mas no el lugar en donde vivirán sus hijos.
Estos dos tipos de personas son igual o peor que los contaminantes que ya están devastando el planeta.
Después de varios intentos para rescatar a la pobre madre naturaleza de los golpes que le hemos dado los humanos, no se ha podido crear conciencia en la mayoría de las personas porque no sufren de lo que sufriremos todos en un tiempo.
Los árboles se derriban, los ríos se enferman y los animales se desvanecen para dejar atrás el mundo perfecto que se le había regalado al humano. Somos un mundo desarrollado, con las herramientas fatales para derrumbar pero al mismo tiempo con las precisas para enmendar y curar este problema. No es lógico estar con las manos atadas y ver cómo nos auto-destruimos, sin embargo es la postura más cómoda que tomamos.
Es verdad que hay muchos experimentos en marcha y grupos ambientales que luchan día a día contra los conflictos que retan a los ecosistemas, lamentablemente lo que debemos enseñar no es como actúa un contaminante sino cómo debemos parar este caos que creamos todos directa o indirectamente.
Respondiendo a la pregunta del principio, si seguimos a este paso, pienso yo que no falta poco para que experimentemos esta amargada situación.
No hay comentarios:
Publicar un comentario